En “Almas de segunda mano”, Charlie Asher acepta la tarea de recolectar las almas de los difuntos para mantener a raya a las fuerzas de la oscuridad. Mientras procura cumplir con esta tarea se enfrenta a todo tipo de criaturas fantásticas y, en el curso de esos combates, muere; pero su alma se librará del infierno gracias a la intervención de su hija, que parece haber heredado los mismos poderes místicos que tenía Charlie. Este es apenas un apunte de una trama desternillante que transita entre San Francisco y el inframundo.