Riedemann blues se organiza en tres momentos: “Falsos Blues”, “Blues subterráneos” y “3 a.m. Blues”. La idea de la música como texto, está presente desde el comienzo de la poesía de Riedemann en aquellos “Blues mapuches” de Karra Maw’n. Allí se canta la armonía de un territorio aún no contaminado y luego la irrupción de 400 años de sangre y explotación. Ese péndulo que marca un recorrido entre la armonía de una naturaleza donde “reventaban en los tallos/ las metáforas”, y la tristeza de la guerra y la usurpación, se traslada también a Riedemann Blues. Es esa música tristemente verdadera que van entonando los fantasmas, los desheredados, los marginales del sistema, los desaparecidos.