Federico Santa María, bisnieto del legendario multimillonario del mismo nombre, vuelve a Chile al cumplirse cien años de la suscripción de su testamento, y descubre una última voluntad de su bisabuelo que aún no había sido revelada: entregar un antiguo libro de rituales medievales llamado El Lemegeton Clavícula Salomonis, también conocido como La Llave Menor de Salomón, a quienes son sus legítimos detentadores, la Masonería, los que deberán custodiarlo hasta que la raza humana esté preparada para conocer sus poderes infinitos. En paralelo, una bomba explota en Buenos Aires en la cripta del
Libertador José de San Martín, antiguo miembro de la logia masónica.