Casi un siglo después de los acontecimientos, el autor recupera la historia de su abuelo en los centros de exterminio, una experiencia tan traumática de la que nunca quiso hablar con sus cercanos.
A pesar de haber sobrevivido a Terezín, Auschwitz y Meuselwitz, Heinz Salinger nunca pudo superar el horror de lo allí vivido. Este relato de coraje y supervivencia nos lleva desde los días de acoso y discriminación sufridos por los judíos en Checoslovaquia hasta la milagrosa huida y la liberación, después de la cual emigró a Chile. Y aunque acá formó una familia y trató de rehacer su vida, los fantasmas de los que no pudieron escapar lo perseguirían por siempre.
Un libro por un nieto que nos invita a honrar a las víctimas y recuperar su memoria.