El consentimiento se ha convertido en un concepto clave en las relaciones sexuales. De entrada, parece claro y perfectamente perimetrado. Pero ¿es realmente así?
Este texto reflexiona sobre los matices, las fisuras y las paradojas que lo acompañan. ¿Se puede verbalizar el deseo con absoluta claridad, sin ambigüedad alguna?
La autora explora el camino recorrido entre el «no es no» y el «solo sí es sí» desde las perspectivas filosófica, histórica y política y, a contracorriente del discurso dominante, defiende no dejar de lado el primero en beneficio del segundo.