La inconfundible voz de Alejandro Zambra se oye con fuerza y delicadeza en las páginas de este libro que, alentados por la paradoja del título, podemos comprender como un originalísimo elogio de la lectura. Inventario de filias, fobias y caprichos, delicioso álbum de citas, proyectos frustrados y declaraciones de amor –a las fotocopias, a la penumbra, a la palabra borrador, a la poesía chilena y a los orilleros del boom latinoamericano–, No leer es un libro apasionado, extraño, divertido y melancólico, de quien es uno de los escritores latinoamericanos más talentosos y reconocidos de los tiempos recientes.
«Hay en estas páginas bosquejos, ensayitos, cuentos camuflados en ensayos (a la manera borgeana) y toda una forma intensa de reflexionar y encantar a los lectores como solo la escritura que escapa a los lugares comunes puede hacerlo» (Fabián Casas, Perfil).
«Una extraordinaria reflexión literaria» (Anna Maria Iglesia, Revista de Letras).
«Un libro que contiene muchos libros. Un libro bonsái. Lectura obligatoria» (Sara R. Gallardo, Koult).
«Los textos aquí reunidos no son subsidiarios del resto de su obra. Se trata, en todo caso, de textos que indagan y exponen una respiración distinta, que funcionan como amable y periódica puesta en cuestión de sus ideas y obsesiones» (Carlos Acevedo, Quimera).