Escrito a ratos desde el desgarro, y siempre desde la emoción, este libro es la crónica íntima de la España de las últimas décadas, pero también una narración sobre todo aquello que nos recuerda que somos seres vulnerables, sobre la necesidad de levantarnos y seguir adelante cuando nada parece hacerlo posible, cuando casi todos los lazos que nos unían a los demás han desaparecido o los hemos roto. Y sobrevivimos.
«Libro potente, sincero, a ratos descarnado, sobre la pérdida de los padres, sobre el dolor de las palabras que no se dijeron y sobre la necesidad de querer y ser querido. Muy bien escrito, además. No me extraña que esté teniendo éxito.»
Fernando Aramburu
«Hace falta mucha precisión para contar estas cosas, hace falta el ácido, el cuchillo afilado, el alfiler exacto que pincha el globo de la vanidad. Lo que queda al final es la limpia emoción de la verdad y el desconsuelo de todo lo perdido.»
Antonio Muñoz Molina