La importancia y fama de «El origen de las especies» (1859), el libro en el que Charles Darwin presentó la teoría de la evolución de las especies, ha hecho que otras obras suyas sean, injustamente, mucho menos conocidas. Tal es el caso de un texto fundamental: «El origen del hombre, y la selección con relación al sexo» (1871), dedicado a estudiar la continuidad que existe entre la especie humana y otros animales.