El cachalote, la criatura más grande de todo el océano, ha conocido la inmensa soledad y la enorme profundidad del abismo, y ha dedicado su vida a cumplir fielmente la tarea que le confió otro cachalote anciano: una tarea misteriosa y crucial, el resultado de un pacto que ha atado a las ballenas y la Gente del Mar. Para honrarlo, la gran ballena blanca tenía que proteger esa parte del mar de otros hombres, los extraños que con sus barcos vienen a llevárselo todo, sin respeto alguno por el entorno natural. Fueron ellos, los balleneros, quienes contaron la historia de la temida ballena blanca hasta ahora, pero ha llegado el momento de que ella hable por sí misma y deje que su antigua voz nos llegue como el lenguaje del mar.